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Acapulco, Guerrero.— Los olores fétidos inundan las distintas colonias del devastado puerto de Acapulco, Guerrero. Las calles se llenaron de escombros y basura, sin que ninguna de las brigadas de apoyo enviadas por el gobierno Federal hagan acto de presencia.
En un recorrido por el Zócalo, Costera Miguel Alemán, colonia Progreso y la avenida Cuauhtémoc, se encuentran decenas de puntos negros.
A ocho días del pasos del huracán, se avisora una ola de enfermedades gastrointestinales de magnitud considerable.
Varios ciudadanos enttevistados, aseguran que «en los canales de su colonia, no han podido sacar los cadávares» que quedaron atrapados.
Un acapulqueño entrevistado, de nombre Óscar, aseguró a Bajo Palabra, que «en la Francisco Villa no se han podido rescatar siete cadávares».
A pesar de todos los avances que diariamente informa el presidente Andrés Manuel y la gobernadora Evelyn Salgado, con la notoria ausencia de la presidenta Municipal Abelina López Rodríguez, no se nota la presencia de brigadas de limpieza en un desvastado Acapulco.
