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En el marco del Día Internacional de la Mujer, la gobernadora Evelyn Salgado Pineda anunció el envío al Congreso de Guerrero de la iniciativa de la “Ley Camila”, una reforma preferente que busca agravar las penas por delitos sexuales y privación ilegal de la libertad contra menores, especialmente cuando las víctimas sean niñas.
La propuesta, que lleva el nombre de Camila, una menor de 8 años asesinada en Taxco en 2024, tiene como objetivo combatir la impunidad y la violencia de género en el estado. “Hoy damos un paso más contra la impunidad, el machismo y la violencia de género. Refrendamos nuestro compromiso con la memoria de Camila y de todas las niñas, adolescentes y mujeres que han sido víctimas de esta violencia”, declaró Salgado Pineda en un mensaje difundido en redes sociales.
El caso de Camila conmocionó a Guerrero y al país en abril de 2024, cuando la niña fue secuestrada y asesinada. Tres hombres, incluidos dos menores de edad, fueron vinculados a proceso por el delito de feminicidio agravado; además, una mujer, madre y esposa de los acusados, murió linchada. Durante la investigación, se reveló que los responsables habían exigido rescates a la madre de la víctima.
La “Ley Camila” busca reformar el Código Penal de Guerrero para imponer sanciones más severas a quienes cometan delitos sexuales o privación ilegal de la libertad contra menores. La gobernadora destacó que esta iniciativa es parte de los esfuerzos para convertir a Guerrero en un “santuario para todas las mujeres”.
El anuncio se produce en un contexto en el que Guerrero ha registrado avances en la reducción de delitos de alto impacto contra las mujeres, según datos oficiales. Sin embargo, casos como el de Camila evidencian la persistencia de la violencia de género y la necesidad de fortalecer las medidas de protección para niñas y mujeres.
La iniciativa será enviada al Congreso local en carácter de preferente, lo que significa que se espera su discusión y aprobación en un plazo más corto que el de otras propuestas legislativas.
El caso de Camila también puso en evidencia fallas en la actuación de las autoridades locales. El entonces secretario de Seguridad de Taxco, Doroteo Eugenio Vázquez, renunció a su cargo tras responsabilizar a la madre de la niña por omisión de cuidado, lo que generó indignación y críticas.