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Columna de Análisis Electoral Partidos y Candidatos
El crimen organizado
Si algo está caracterizando el proceso electoral en Guerrero, es el desorden, el caos político, la inseguridad y la filtración del crimen organizado en diversas candidaturas a diputaciones locales y federales, así como en ayuntamientos de la Costa Grande, Zona Norte, Zona Centro y Tierra Caliente, principalmente.
Desde el periodo de precampañas se han presentado hechos que así lo demuestran: en junio del año pasado fue filtrado un video en el que fue captada la alcaldesa de Chilpancingo, Norma Otilia Hernández, en reunión con Celso Ortega Jiménez, líder de la banda delictiva Los Ardillos, aunque la alcaldesa reconoció dicha reunión, dijo que el video fue editado y dio a entender que otras personalidades de la política guerrerense se encontraban en dicha reunión, también aseguró no se trató de un pacto con la delincuencia organizada.
El pasado 15 de febrero se dio a conocer que los cuatro obispos de Guerrero se reunieron con líderes criminales para pactar la paz en este proceso electoral, pero no llegaron a ningún acuerdo porque los líderes criminales se niegan a “soltar” sus territorios que ganaron a costa de sangre y vidas de por medio.
En lugar de ganar la tan ansiada paz en Guerrero, ahora los líderes criminales condicionan y llegan a acuerdos con los partidos para postular candidatos afines a sus intereses, tal es el caso de la excandidata del PVEM a la presidencia de Copala, Candy Espinoza Ríos, quien renunció porque no le ofrecieron la seguridad que pedía. Candy asumió la candidatura que le correspondía a su hermano Jesús González Ríos, asesinado y desollado en junio del año pasado.
De igual manera renunciaron los morenistas Elia Camacho, a la candidatura a la presidencia de Coyuca de Catalán, y Yasir Deloya, a la candidatura a la diputación en Tecpan de Galeana, ambos municipios controlados por el crimen organizado, de éste último se dice que su lugar será ocupado por una mujer del PVEM, en acuerdo con el crimen organizado que controla la Costa Grande.
La inseguridad
El 24 de noviembre de 2023 fue asesinado a balazos afuera de su casa, Jaime Dámaso Solís, ex dirigente municipal del PAN en Zitlala. En las últimas elecciones fue candidato a presidente municipal de su localidad.
El 7 de febrero de este año, un comando levantó y privó de la libertad al coordinador estatal de Movimiento Ciudadano (MC) en Guerrero, Julián López Galeana, a quien golpearon y despojaron de una camioneta en la que viajaba con sus colaboradores, a pesar de que el dirigente sostuvo que se trató de una confusión no le fueron devuelta ni su camioneta ni su celular.
El 3 de marzo, Alfredo González, aspirante del PT a la presidencia municipal de Atoyac, se convirtió en el primer político en ser asesinado durante las campañas electorales en Guerrero. El homicidio ocurrió en el Boulevard Juan Álvarez, por arma de fuego.
El 12 de marzo fue asesinado Tomás Morales, uno de los aspirantes morenista a la presidencia de Chilapa, unos días antes de su asesinato, había acompañado a Claudia Sheinbaum a su arranque de campaña, mientras que, Jacinto González Varona declaró que en Chilapa no había condiciones para participar.
Ante esta situación de inseguridad, el pasado mes de febrero, la Junta Local Ejecutiva del Instituto Nacional Electoral (INE) en Guerrero presentó el esquema de seguridad para las y los candidatos a cargos de elección popular en el estado de Guerrero. El protocolo establece que los candidatos serán custodiados por personal de la Secretaría de la Defensa Nacional o la Guardia Nacional, dependiendo el tipo de riesgo al que estén expuestos y esto lo determinará la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana Federal.
De acuerdo a Fabiola Matildes Gamas, consejera y presidenta del Instituto Electoral de Participación Ciudadana, hasta el 03 de abril, solo tres candidatos a diputaciones locales habían solicitado seguridad, pero que, por los protocolos no se podían dar a conocer sus nombres.
También dio a conocer que los focos rojos y zonas de alto riesgo para los candidatos son en municipios de la Tierra Caliente, algunas zonas de la región Centro y la Costa Grande.
El despapaye político
Por si la filtración del crimen organizado en el proceso electoral en el estado y la inseguridad y asesinatos de candidatos fueran poca cosa, el mapa político de Guerrero y, particularmente, en Acapulco, se ha convertido en un verdadero despapaye con la renuncia y cambio de partidos como si de vestido de fiesta se tratara y el llamado al voto cruzado.
Actores políticos como el exgobernador Ángel Aguirre Rivero, se ha convertido en el principal impulsor del llamado “voto cruzado”, queriendo venderlo como la panacea de la democracia contemporánea. En su afán por colocarse como un articulador con todos los institutos políticos del estado, quiere hacer creer que son lo mismo Tirios que Troyanos, que es lo mismo la izquierda que la derecha; y que lo que importa es la persona por encima de los principios partidistas.
Decía Andrés Manuel López Obrador que, el que piense así es un ambicioso vulgar que busca solo un interés personal y no el beneficio del pueblo.
Por otro lado, las renuncias a los partidos ha marcado la agenda política desde inicio de año, primero fueron los expriistas Héctor Astudillo Flores y Mario Moreno Arcos en afiliarse a Movimiento Ciudadano ante la imposición de Manuel Añorve para reelegirse como senador; después el abandono a Morena por parte de los expriistas Yoshio Ávila y Carlos Granda, el primero para irse como candidato a presidente municipal por el MC y el segundo para abanderar a la colación Fuerza y Corazón por México, conformada por el PAN, PRI y PRD.
Derivado del nombramiento de Yoshio Ávila como candidato de MC, se vinieron las renuncias de Abimael Salgado, Alberto López Rosas y Genaro Vázquez Flores, que se había registrados como aspirantes a abanderar al MC, éste último se registró como regidor en la planilla de Morena.
Otra renuncia fue la de Ramón Almonte a la candidatura a la diputación federal 04, por el nombramiento de Carlos Granda como abanderado de la Coalición Fuerza y Corazón por México, su lugar fue tomado por el exmorenista Allam Argüello, cercano al senador Félix Salgado Macedonio, quien se inconformó porque Morena postuló al expriista Javier, hermano del fallecido Ricardo Taja.
Así el panorama antes de que inicien las campañas a las presidencias municipales y no se ve por ningún lado que serán campañas de civilidad política, al contrario, sin duda, serán campañas de descalificaciones y con escasas propuestas serias de cómo hacer para reconstruir Acapulco y Guerrero.
