Table of Contents
La columna de este día del periodista Salvador García Soto del periódico El Universal, da cuenta de la corrupción en el ISSSTE que dirige el morenista Martí Batres. El tráfico de influencias y la simulación del combate a la corrupción exhiben a un gobierno donde las viejas formas de transar siguen vigentes pero con otro color.
El periodista narra que los servicios de limpieza y desinfección para este año 2025 en toda la red de clínicas, hospitales e instalaciones del ISSSTE, fueron otorgadas a la empresa Ocram Seyer-Wilk, por un monto de 1,024 millones de pesos.
La empresa Ocram de la que nadie sabe quién es dueño, aparece representada por Estela Vega Montaño, y Gabriel Rosas Rivera.
Soto menciona que "el nombre de Estela Vega Montaño aparece también en uno de los casos de corrupción más escandalosos en el sexenio del expresidente Peña Nieto, que se conoció como el “Capufe Leaks”, en donde esa mujer fue señalada de formar parte de una red de empresas vinculadas que fueron beneficiadas con contratos de Caminos y Puentes Federales en el sexenio peñista".
Ahora bien, "ese contrato multimillonario ha sido impugnado ante la Secretaría de Corrupción y Buen Gobierno, porque otras de las empresas que participaron en la licitación electrónica, LA-51-GYN-051-GYN005-N-33-2025, se inconformaron ante dicha secretaría anticorrupción aduciendo que las áreas administrativas del ISSSTE no analizaron su propuesta económica para dichos servicios de limpieza, que era más baja y apegada a los precios del mercado, y decidieron otorgársela a la empresa Ocram Seyer-Wilk, que presentó una propuesta mucho más cara, con lo que se generó un daño de 100 millones de pesos a las finanzas públicas", detalla el periodista.
En resumen, el contrato se lo dieron de manera ilegal a la empresa que representa Estela Vega Montaño a pesar de haber presentado la propuesta más costosa. Lo que significa que Vega Montaño sigue contando con buenos amigos en el gobierno de la doctora Claudia Sheinbaum, porque el ISSSTE le otorgó el mencionado contrato de Servicios de Limpieza y desinfección para este año a pesar de no haber presentado la propuesta más conveniente para el instituto.
Sin embargo, lo más interesante de este entramado corrupto es que tras revisar la queja presentada el 18 de febrero pasada contra la asignación de ese contrato a la empresa Ocam, la Secretaría que dirige Raquel Buenrostro, ordenó reponer el fallo de dicha licitación Incluso, pero al ser repuesto el procedimiento de licitación, nuevamente se le adjudicó el contrato a Ocram Seyer Wilk. En resumen, de nada sirvió la queja presentada ante la Secretaría Anticorrupción y Buen Gobierno, pues solo se simuló atender una queja donde la corrupción terminó legalizada.
"Las empresas que representa Vega Montaño —cuyo verdadero propietario se desconoce públicamente— han obtenido contratos por miles de millones de pesos en los últimos años, tanto en la administración de Peña Nieto como en la actual, a pesar de que sus propuestas presentan sobrecostos frente a otras opciones, generando daños millonarios al erario público. Está claro que lo que cambia son solamente los colores, pero la corrupción sigue en las mismas manos", comenta el periodista. (Fuente: https://www.eluniversal.com.mx/opinion/salvador-garcia-soto/los-lopez-obrador-quieren-ser-espanoles/)