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Tabasco donde falló la 4T: opacidad, impunidad, sectarismo y violencia

López Obrador visita un estado en virtual toque de queda, la inseguridad rebasa cualquier expectativa de un mejor futuro.

Tabasco una asignatura sin resolver.

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Dicen algunos medios de comunicación locales que ahora sí, la virtual presidenta Claudia Sheinbaum va a transformar Tabasco, con lo cual están afirmando que el presidente saliente, Andrés Manuel López Obrador no hizo bien esta tarea.

En Tabasco, el gobierno saliente de Morena que está entregando en la opacidad y oscuras al nuevo gobernador Javier May, no dio resultados. No hizo ni siquiera un terraplén, ya no digamos el primer piso de la llamada cuarta transformación.

Por ejemplo, esta semana se reportó que Tabasco es de los estados con mayor inflación anual en el país en abril de 2024, con el (3.4%)  junto con Puebla (5.4%), Yucatán (5.4%), Oaxaca (5.3%), Hidalgo (5.2%) y Tlaxcala (5.1%). Las entidades con menor inflación fueron Guerrero (2.9%), Baja California Sur (3.7%), Estado de México (4.0%) y Tamaulipas (4.2%). A este mal se le suma el crimen organizado y la violencia en todo el estado.

Una mayor inflación significa que los precios de las cosas que compramos, como alimentos, ropa, transporte y vivienda, aumenten. En otras palabras, el dinero se degrada con el tiempo y los precios de los bienes y servicios tienden a aumentar. De nada sirve que la gente gane más o le den más dinero público, pensión, becas, si no les alcanza para satisfacer necesidades.

Este sábado el presidente tabasqueño López Obrador va estar en su tierra natal, va inaugurar un tramo troncal de carretera. Allá estará con él, Carlos Manuel Merino Campos, el gobernador suplente y saliente; un personaje anodino y vulgar que Adán Augusto López dejó a cargo del gobierno estatal para buscar un mejor hueso.

Tabasco es una ruina, lo dice todo el que pasa por aquí.  El presidente no hizo nada por su tierra. La inseguridad tiene en virtual toque de queda a todos los municipios. En Villahermosa, la capital, la vida nocturna desapareció, no hay turismo, no hay desarrollo. Hay infinidad de locales y casas cerradas y abandonadas, las principales calles están desiertas.  Aquí no se puede hablar de ninguna cuarta transformación, ni siquiera de una primera.

Abandono por todas partes

A este desolador panorama se suma, para agravar más el atraso social y político de Tabasco, la política de oscuridad y simulación del nuevo gobernador Javier May Rodríguez. La ruta que parece seguir es la misma que ya recorrió el nefasto gobernador chiapaneco Rutilio Rendón (del mismo partido), un personaje incapaz que tiene a Chiapas en una de las mayores crisis de inseguridad de su historia, luego del conflicto zapatista. De nada sirve que el presidente inaugure obras, puentes, malecones, caminos, si la población no las puede disfrutar por la inseguridad y la violencia.

Entrega recepción opaca

La entrega recepción del gobierno de Tabasco comenzó en la opacidad y el encubrimiento. De este ejercicio los ciudadanos no están informados de nada.

En Tabasco nadie sabe en qué condiciones deja el gobierno Carlos Manuel Merino Campos y cómo lo recibe Javier May. No se informa nada porque es obvio que hay grandes huecos presupuestales, que hay enormes deficiencias que buscan solapar por ser un gobierno también de Morena. Por ejemplo, nada dicen del presupuesto del DIF en seis años.

Remodelaciones que no se usan

La soberbia es abundante por saberse protegidos por el halo de la impunidad presidencial. No comienza el gobierno de May, y ya se reportan actitudes abusivas, desatenciones, exclusiones en todas las secretarías que se están recibiendo. Anuncio de despidos. A falta de información oficial, lo que se impone es el chisme, el argüende. No hay información útil a los ciudadanos sobre la entrega recepción, lo que hay es propaganda, culto a la personalidad, zalamería.

Falta la información de cómo se constituyeron los equipos de entrega recepción, quiénes reciben y quiénes entregan, qué y cómo entregan, toda esa es información pública. Solo como propaganda se dice que ‘la entrega recepción va bien y si problemas’. No es para menos, pues se trata de encubrir las faltas del saliente. No hay un diagnostico de cómo está Tabasco actualmente y qué van a intentar hacer para rescatarlo de la mediocridad y el abandono. La corrupción tiene muchos rostros y la falta de información, la manipulación y la impunidad gubernamental es una de ellas.

La disfuncionalidad del gabinete anunciado por Javier May ya comienza a notarse, hay secretarios y secretarias que están encerrados para no hablar ni recibir a nadie que no sea de la misma pandilla gobernante. Repiten la misma conducta de siempre: de una vez estando en el cargo buscan alejarse de las y los ciudadanos.  En el caso de la alcaldesa reelecta del municipio de Centro, Yolanda Osuna,  sus reuniones son selectivas, no hubo gira de agradecimiento por las colonias como si solo los empresarios fueran los únicos que votaron por ella.

Calle peatonal invadida por la impunidad y la corrupción

Lo que resta de los seis años que vienen no es un panorama alentador para Tabasco cuando su nuevo gobierno ya muestra el cobre desde antes de tomar el control. Lo que se ve no se juzga. Hay mediocridad abundante en las personas a cargo de las secretarías. Algunas no tienen ni siquiera el perfil profesional adecuado. Les regalaron el cargo. Hay opacidad y poca voluntad de transparencia. Por otra parte, el Congreso local, con mayoría de Morena, no tiene tampoco ninguna voluntad de contrapeso, no hay oposición inteligente, no hay voluntad de cambio. Se impone la opacidad. Pobre Tabasco, otra vez seis años en lo peor.

LA CONTRA: Dicen que la ex secretaria de Educación de Tabasco, Egla Cornelio Landero, renunció a escasos meses de terminar el sexenio porque se va a grillar por una posición a la universidad de Tabasco donde es parte de esa mafia que tiene en la quiebra y la miseria a la máxima casa de estudios tabasqueña. Egla Cornelio tuvo una administración mediocre y corrupta como siempre ha sido; alejada de la gente a la que le negó el apoyo de la institución.  Mujer clasista y discriminatoria que ahora busca regresar a seguir viviendo de la "academia".  Uno de los funcionarios que la acompañó en su nefasto periodo fue Jorge Luis Amézquita Pérez, una especie de ‘comunicador’ con puesto de maestro que sintiéndose con mucho poder también se dedicó al maltrato y manipulación de los que solicitan apoyos de esa dependencia. ¿Cuántas gentes más así van a llegar y repetir en el 'nuevo' gobierno de Tabasco?

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