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Orgulloso, el señor Javier May, gobernador electo de Tabasco que sustituye al más que mediocre Carlos Manuel Merino Campos, presentó este jueves al cantante trovero Salvador Manrique como subsecretario de Desarrollo y Promoción Cultural y a Karla Alejandro Garrido Perera, que salta de una diputación local de Morena, a la subsecretaría de Formación y Fomento de las Artes y la Cultura, como si no hubiese verdadera gente preparada en Tabasco.
El trovero Manrique ocupará un cargo estratégico para la cultura en Tabasco, pues es el enlace con Vinculación Cultural del gobierno federal. Ese cargo lo deja, con más pena que gloria, Alxandra Rebolledo, una persona igualmente mediocre, prepotente. Fue parte del equipo cobra sueldos del nefasto Ramiro Chávez. Por eso Tabasco está como está.
Durante la campaña de Javier May, el señor Manrique fue designado para ser enlace con todos los grupos culturales de la entidad, una encomienda que no cumplió porque fue excluyente y sectario, solo se reunió con personas afines a Morena buscando su respaldo. De hecho, fue repudiado por la mayoría porque no representa al sector de hacedores, gestores y promotores culturales de la entidad. Manrique es un músico que se dedica al entretenimiento barato en bares, logró popularidad en el sector adulto, por un sempiterno programa de radio que dirige llamado la Bohemia de Manrique.
La designación de Salvador Manrique en la subsecretaría de Desarrollo y Promoción Cultural, les dice a los artistas y promotores culturales tabasqueños que Javier May no tiene ningún plan original ni moderno para el desarrollo de la cultura y el arte en Tabasco. De tenerlo, no habría nombrado a un ignorante de las políticas culturales del país y de las tendencias más actuales de los modelos de gestión cultural para los gobiernos.
Javier May sigue creyendo como todos los políticos 'criados' en la improvisación, que la cultura es cualquier cosa, menos una especialización. Por eso ponen a cargo de ese sector a lo peor que tienen, allá mandan a esos retazos políticos que no quieren en ninguna otra parte del gobierno. Al cabo que ahí nadie dice nada.
Nadie cree que Manrique sea más listo que Margarita Orrico, Vicente Gómez Montero, o Héctor de Paz, viejos funcionarios culturales que, no obstante su experiencia, nada trascendente pudieron hacer con los cargos que ostentaron en esa secretaría. Por eso la cultura y el arte en Tabasco están en etapa terminal. A lo mejor, algún ignorante crea que hacer de la Quinta Grijalva otro espacio cultural subutilizado como los que ya hay, sea el remedio pero también se equivocan. Ojalá haya presupuesto para el mantenimiento.
Junto con Salvador Manrique también fue designada Karla Alejandro Garrido Perera, una chica que acaba de dejar el encargo de diputada local de Morena. Un cargo que consiguió mágicamente pues nunca tuvo ninguna experiencia política. Ahora brinca, también mágicamente, a la recién creada mágicamente subsecretaría de Formación y Fomento de las Artes y la Cultura, antes llamada Subsecretaria del Fomento a la Lectura y Publicaciones. Algo muy bueno debieron de verle los líderes morenistas como para darle sendos regalos.
Karla Alejandro sustituye en ese cargo a Melina Pedrero, otro engendrito de la mediocridad y la prepotencia. El ahora exsecretario de Cultura Ramiro Chávez Gochicoa y su equipo de mediocres deja la educación artística en Tabasco raquítica y desfigurada. El Ceiba es una institución que se ha convertido en una 'casa del árbol' o asilo, con maestros que debieron jubilarse hace siglos y que ya no enseñan porque sus lenguajes artísticos son obsoletos.
Cero logros y sin embargo...
Durante su estancia como diputada de Morena en el Congreso local, Karla Alejandro no generó ningún tipo de trabajo trascendente. No tiene logros sociales que presumir. Se dedicó a simular, a cobrar su sueldo y a practicar la noble labor del cortesano. Las fotos que compartía en sus redes sociales como diputada, son las acciones ordinarias de todo legislador: reuniones, levantamiento de manos, asistencia a eventos sociales y políticos, comidas, fiestas, etc. No se le ve en ninguna foto con campesinos, gente pobre o haciendo alguna gestión para que se mejore algo en Tabasco. No hay ningún posicionamiento crítico, ni ninguna exigencia de rendición de cuentas y transparencia. Nada. Pero algo bueno debieron verle los líderes morenistas como Adán Augusto, su padrino.
Sorprende que alguien sin la experiencia en temas de derechos humanos, igualdad de género y asuntos de la frontera sur, haya estado al frente de esta comisión legislativa. Su ‘experiencia’, si es que la tiene, no fue en esos temas de los que no conocía nada cuando llego como diputada; su área de prácticas fue hacer un poco de canto en la UJAT donde estudió una carrera técnica, pero con el pésimo nivel educativo que tiene la universidad tabasqueña se complica hablar de preparación. Luego, hizo una licenciatura en música en otra universidad mediocre en Chiapas.
Lo que sí es digno de destacar de la carrera de la nueva subsecretaria de Formación y Fomento de las Artes, es que dice en su currículum que fue directora coral y profesora de canto del coro de la “Orquesta sinfónica infantil” de Villahermosa, de julio del 2018-2021. Todos en Tabasco saben que esa ‘orquesta’ fue un fraude que hizo el exalcalde de Centro, Evaristo Hernández, para robarse varios millones de pesos con el apoyo del músico sinvergüenza Joaquín Borges Carrete y la directora coral, hoy subsecretaria de formación artística.
En su nota de X (antes twitter) el señor May dice que ambos subsecretarios (Manrique y Karla Alejandro) “enriquecerán el trabajo con nuestra compañera Aida Castillo en la Secretaría de Cultura”. Pero lástima, la señora Castillo también está igual o peor que los subsecretarios, pues no solo no tiene el conocimiento apropiado en la ejecución de políticas públicas de gestión y administración cultural, sino que jamás se ha interesado por nada que tenga que ver con la literatura, las artes visuales, el cine, el teatro, las industrias culturales, etc., su perfil es de licenciada en comunicación, egresada de esa secundariota que es el UJAT.
“Tabasco espera mucho de ustedes. No nos fallen. Saludos”, escribió la promotora y exfuncionaria de cultura, Norma Domínguez debajo de la nota de May, pero a leguas se nota que es ironía.
