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En su discurso conmemorativo de los primeros 100 días de su gobierno, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, emitió una firme postura sobre la relación bilateral entre México y Estados Unidos ante el regreso de Donald Trump a la presidencia estadounidense. En un contexto marcado por tensiones en comercio, migración y seguridad, Sheinbaum subrayó que el diálogo y el respeto mutuo serán pilares en la política exterior mexicana, a la vez que reafirmó la independencia del país. “La relación entre México y Estados Unidos será buena y de respeto, y prevalecerá el diálogo”, declaró Sheinbaum, al destacar la importancia de un enfoque de colaboración. “Nuestra visión es el humanismo mexicano y la fraternidad entre los pueblos y las naciones”, añadió, insistiendo en la necesidad de evitar confrontaciones unilaterales que afecten los intereses mutuos. Durante su intervención, Sheinbaum hizo referencia al precedente de cooperación entre ambos países, destacando la firma del Tratado México-Estados Unidos-Canadá (T-MEC) durante el primer mandato de Trump. Calificó este acuerdo como un ejemplo de cómo las naciones pueden beneficiarse a través de la colaboración económica. Sin embargo, advirtió que México no cederá en su soberanía. “Nos coordinamos, colaboramos, más no nos subordinamos”, enfatizó. En un mensaje directo, Sheinbaum reconoció la labor de los migrantes mexicanos en Estados Unidos, a quienes calificó como "héroes y heroínas de la patria". La mandataria subrayó que el aporte de la comunidad mexicana a la economía estadounidense es significativo. “Este año enviaron cerca de 65 mil millones de dólares a sus familias en México, lo que representa solo el 20% de lo que generan allá en consumo, ahorro e impuestos”, destacó. La presidenta también hizo un llamado a la unidad y el respaldo hacia los connacionales en el extranjero, afirmando que el gobierno mexicano continuará reconociendo y defendiendo sus derechos. “Nuestros hermanos y hermanas migrantes no olvidan a sus familias y a su patria, y nosotros tampoco los olvidamos”, dijo. El discurso también dejó entrever una respuesta a las declaraciones de campaña de Trump, quien ha prometido endurecer las políticas comerciales y migratorias, además de considerar acciones militares contra los cárteles en México. Frente a estas propuestas, Sheinbaum hizo un llamado a fortalecer la soberanía nacional y promover la integración económica y comercial del continente americano. “Nuestra propuesta ha sido no solo América del Norte, sino la integración de todo el continente americano, convirtiéndolo en la región más poderosa del mundo, con respeto a la libertad y la soberanía de todos sus pueblos”, señaló. Sheinbaum también expresó su solidaridad con las víctimas de los incendios forestales en Los Ángeles, California, que han dejado al menos 16 muertos y miles de estructuras destruidas. Reconoció la labor de la brigada de combatientes mexicanos y del personal del Plan DN-III-E desplegado en la región. El discurso de Sheinbaum marca el inicio de una nueva etapa en la relación bilateral México-Estados Unidos, caracterizada por un equilibrio entre la colaboración y la defensa de los principios nacionales. Frente a un panorama internacional incierto, la mandataria enfatizó que México mantendrá su postura como una nación libre, independiente y soberana.