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Ciudad de México.- La Presidenta Claudia Sheinbaum confirmó este martes que envió al Senado la terna para definir a la próxima titular de la Fiscalía General de la República (FGR), integrada exclusivamente por mujeres, aunque evitó precisar quiénes fueron las seleccionadas.
“La terna son tres mujeres”, dijo la Mandataria durante su conferencia, para de inmediato postergar los detalles: “lo van a dar a conocer en un rato… En este momento lo más importante es el salario mínimo”.
El anuncio, hecho sin nombres y acompañado de evasivas, ocurre un día después de que el Senado —con mayoría de Morena y sus aliados— aprobara el listado de 10 aspirantes elegibles, entre los que destaca la actual encargada de despacho de la FGR, Ernestina Godoy. Godoy, cercana al oficialismo y figura clave en la agenda de seguridad y justicia de la 4T, es vista por grupos opositores como la favorita del gobierno para encabezar la autonomía constitucional de la Fiscalía.
En la lista aprobada por el Senado también figuraron perfiles como Luz María Zarza Delgado, Maribel Bojorges Beltrán, Sandra Luz González Mogollón, Mirna Lucía Grande Hernández, así como aspirantes varones: Luis Manuel Pérez de Acha, Alfredo Barrera Flores, Hamlet García Almaguer, David Borja Padilla y Miguel Nava Alvarado.
Sheinbaum justificó su elección al afirmar que “es tiempo de mujeres” en la administración de la autollamada Cuarta Transformación. No obstante, ni el Ejecutivo ni el Senado han explicado los criterios de evaluación, los motivos para descartar a ciertos perfiles o el mecanismo para blindar la autonomía de la FGR frente a presiones políticas.
La opacidad de los nombres en la terna y el protagonismo de figuras cercanas al oficialismo han reavivado cuestionamientos sobre la independencia del proceso. Legisladores de oposición y organizaciones civiles ya habían advertido que, sin reglas claras ni perfiles técnicamente evaluados, el relevo en la Fiscalía corre el riesgo de convertirse en un nombramiento político disfrazado de renovación institucional.
La decisión final quedará en manos del Senado, que deberá seleccionar a la próxima Fiscal General en un contexto marcado por tensiones entre promesas de autonomía y la fuerte influencia del bloque mayoritario. La terna, por ahora, sigue siendo un misterio anunciado.
