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Ciudad de México.- La presidenta Claudia Sheinbaum respondió con dureza a los productores y transportistas que paralizaron el país el lunes con bloqueos en 17 entidades. Desde Palacio Nacional, la mandataria aseguró que “no hay razón” para las protestas, pues —según dijo— existen mesas de diálogo abiertas en materia de seguridad, agricultura y la Ley de Aguas Nacionales.
Sheinbaum insistió en que detrás de las movilizaciones “hay asuntos políticos”, particularmente por la iniciativa de nueva ley de aguas que se discute en el Congreso. Señaló a concesionarios que reciben agua para riego sin costo y que, afirmó, buscan seguir “mercantilizando lo que no usan”.
“Hay quien se manifiesta para mantener privilegios que ya no queremos que existan”, lanzó la presidenta, al subrayar que casi 80% del agua nacional se destina al riego agrícola.
Pese a los bloqueos, Sheinbaum negó que existan carpetas de investigación contra dirigentes de las organizaciones movilizadas. Aclaró que cerrar carreteras es delito, pero sostuvo que su gobierno no perseguirá a manifestantes, y atribuyó a un malentendido los señalamientos de la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez.
Aun así, insistió en que muchos de los participantes se sumaron para defender ventajas en el acceso al agua, pues la reforma busca que el excedente generado por la tecnificación de riego deje de venderse de manera privada —práctica permitida desde 1992— y se devuelva a la Conagua para abastecer a la población.
“¿Para qué cerrar las carreteras si hay una mesa de diálogo?”, cuestionó la presidenta, quien afirmó que su gobierno ha atendido las demandas de seguridad en carreteras y mantiene abiertas mesas permanentes con productores.
Sobre la reforma hídrica, reiteró: “Si se trata de defender privilegios para acaparar agua, pues ahí sí ya no; estamos transformando el país para que haya agua para todos”.
Sheinbaum cerró su postura asegurando que su administración “no caerá en provocaciones” y no reprimirá las protestas, aunque insistió una vez más en que “no había razón para cerrar las carreteras”, salvo que —dijo— algunos quieran sostener privilegios que el gobierno busca revertir.
