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Chilpancingo, Guerrero.- La secretaria de Cultura del estado, Aída Melina Martínez Rebolledo, ofreció una disculpa pública por el homenaje cívico realizado al exgobernador Rubén Figueroa Figueroa, al reconocer que dicho acto representó “un error y un agravio directo a la memoria histórica de Guerrero”, en un contexto de fuerte inconformidad social y exigencias de verdad y justicia por parte de familiares de víctimas de la represión estatal.
En un pronunciamiento difundido en su cuenta personal de Facebook, la funcionaria se dirigió “a las víctimas de la Guerra Sucia y a sus familias; a las comunidades culturales, pueblos originarios y afrodescendientes; y al pueblo de Guerrero”, y afirmó que su posicionamiento parte “de la reflexión profunda y la autocrítica”. En el mensaje sostuvo que “ninguna Ley ni reglamento puede estar por encima de la dignidad humana y el dolor de las víctimas”.
Martínez Rebolledo reconoció de manera explícita que el acto realizado en torno a la figura de Figueroa Figueroa —a quien distintos colectivos señalan como responsable de graves violaciones a derechos humanos— “revictimiza a quienes sufrieron sus consecuencias y contradice los principios de verdad y justicia”. Añadió que rendir un homenaje público “a quien representó la represión como actuar” constituye una falta frente a la memoria histórica del estado.
Como parte de su posicionamiento, ofreció “una disculpa pública, sincera y sin matices” a los sobrevivientes, a las familias de personas desaparecidas y a la sociedad guerrerense “por el dolor e indignación que este acto provocó”, y afirmó: “Escucho su reclamo y valido su legitimidad”.
La secretaria informó además que se promovió una revisión y actualización del calendario cívico del estado, así como la presentación del sustento técnico-jurídico para una iniciativa de reforma al artículo 30 de la Ley 761 sobre Símbolos de Identidad y Pertenencia, con el objetivo de que el marco normativo “deje de ser una inercia del pasado y refleje los valores democráticos del presente”. También señaló que se priorizará el uso de espacios públicos y actos oficiales para “dignificar a las víctimas, preservar el legado de las luchas sociales y educar en Derechos Humanos”.
El pronunciamiento ocurre días después de que familiares de víctimas y organizaciones culturales desconocieran al subsecretario de Desarrollo Político y Social, Francisco Rodríguez Cisneros, como interlocutor del gobierno estatal, al acusarlo de tergiversar las demandas planteadas en una reunión con la gobernadora Evelyn Salgado. Los colectivos sostuvieron que sí exigieron una disculpa pública, la destitución de la secretaria de Cultura y el reconocimiento pleno de las responsabilidades del Estado por la represión ejercida entre 1965 y 1990.
En ese contexto, los colectivos reiteraron que la disculpa debe ser emitida directamente por la titular del Ejecutivo estatal y advirtieron que no participarán en actos oficiales mientras no se reconozca formalmente el agravio ni se atiendan sus exigencias de memoria, verdad, justicia y garantías de no repetición.