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Moscú.- Rusia puso en servicio de combate, por primera vez, un regimiento de las Fuerzas Aeroespaciales equipado con el sistema de misiles antiaéreos S-500, una plataforma diseñada para interceptar objetivos en el espacio cercano, anunció este miércoles el ministro de Defensa, Andréi Beloúsov.
El funcionario explicó que esta incorporación forma parte de un proceso de modernización a largo plazo de las Fuerzas Armadas rusas, impulsado por el deterioro del entorno de seguridad y el rápido desarrollo de tecnologías militares avanzadas.
“El análisis de la situación político-militar muestra que las amenazas a la seguridad de Rusia han cambiado de manera significativa en los últimos tres años”, afirmó Beloúsov, al advertir que la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) se estaría preparando para un posible enfrentamiento directo con Moscú hacia finales de esta década.
En este contexto, el ministro subrayó que Rusia no busca escalar tensiones, sino responder a presiones externas. “No amenazamos; somos amenazados”, sostuvo, al justificar la construcción de unas Fuerzas Armadas “modernas y de alta tecnología”.
Como parte de esta reestructuración, las Fuerzas Aeroespaciales han creado por primera vez una división especializada en defensa aérea y antimisiles. El nuevo regimiento equipado con el sistema S-500 representa, según Beloúsov, un hito en las capacidades defensivas del país, al ampliar el alcance de interceptación más allá de la atmósfera terrestre.
Paralelamente, el Ministerio de Defensa impulsa cambios organizativos orientados a incrementar el control, la movilidad y la autonomía operativa de las grandes unidades militares. Tan solo este año se han conformado cinco divisiones, 13 brigadas y 30 regimientos, mientras que para el próximo año se prevé la creación de otras cuatro divisiones, 14 brigadas y 39 regimientos adicionales.
Beloúsov destacó además el fortalecimiento de las fuerzas nucleares estratégicas. En el componente naval se incorporó el submarino nuclear Kniaz Pozharski, equipado con misiles balísticos Bulavá, con el objetivo de reforzar la capacidad de disuasión del país.
Asimismo, las Fuerzas Aeroespaciales recibieron dos bombarderos estratégicos Tu-160M, mientras que las Fuerzas de Misiles Estratégicos continúan su proceso de rearme con el sistema Yars. El ministro reiteró que antes de que finalice el año también entrará en servicio de combate el sistema móvil terrestre Oréshnik, con misiles de alcance intermedio.
