Table of Contents
Eufemia González García y sus dos pequeños hijos, de origen indígena, fueron liberados la tarde de ayer lunes tras permanecer varias horas retenidos en Cuyuxtlahuac, municipio de Alcozauca, en la región Montaña, mientras llevaban comida a los trabajadores de una construcción.
El día de ayer, a través de plataformas digitales, se difundieron imágenes de “la captura” de la mujer indígena y sus hijos, originarios de Cruz Fandango. En una fotografía, se observa a la mujer encerrada en una celda, mientras una de sus hijas espera afuera.
De acuerdo con el ayuntamiento de Alcozauca, a través de la Dirección Municipal de la Mujer, la liberación de los tres habitantes se logró mediante acuerdos con las autoridades del núcleo ejidal de Cuyuxtlahuac, a fin de “no violentar sus derechos fundamentales”, según denunció el Centro de Derechos Humanos de la Montaña “Tlachinollan”.
Eufemia González es esposa del comisario suplente de Cruz Fandango. Según un comunicado de Tlachinollan, fue detenida por policías y el comisario de la comunidad de Cuyuxtlahuac mientras llevaba alimentos a los trabajadores que edifican la casa de su sobrino.
La organización señaló que la raíz de la detención radica en decisiones del gobierno municipal de Alcozauca, presidido por Crispín Agustín Mendoza. En una sesión de cabildo del 3 de marzo, se desconoció la calidad de comisaría de Cruz Fandango sin realizar consulta alguna a sus habitantes, convirtiéndola en una colonia de Cuyuxtlahuac, según denunció la organización civil.
Además, el 7 de marzo, el ayuntamiento notificó a los pobladores de Cruz Fandango (conocido también como Pueblo de Dios) que no podían construir viviendas, sembrar, trabajar o alterar las tierras ejidales sin contar con una resolución judicial, explicó la organización.
El ayuntamiento de Alcozauca ha llevado a cabo “cambios arbitrarios” que perjudican a los vecinos de Cruz Fandango, al no tomar en cuenta su opinión ni consultar si estaban de acuerdo, señaló Aarón Díaz, abogado del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan.
Díaz también expuso que las autoridades de Cuyuxtlahuac nunca reconocieron las tierras de los pobladores de Cruz Fandango, quienes siguen siendo considerados disidentes en un conflicto que ha perdurado por generaciones. Hasta ahora, las autoridades no han logrado una solución definitiva a esta problemática.