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Acapulco, Guerrero.— El restaurador de esculturas religiosas, Enrique Morales Delgado aseguró que tras el azote del huracán Otis en la entidad las reparaciones de imágenes del niño Dios han aumentado hasta en un 40 por ciento.
Entrevistado en su taller, ubicado en la calle dos de agosto del Mercado Central, explicó que la mayoría de las personas acuden para reparar sus figuras luego de que se quebraran en la noche que impactó el huracán.
“Para la mayoría Otis dejó desgracias, pero para nosotros nos dejó mucho trabajo, todo este año hemos estado trabajando, pero en estos dos meses la mayoría viene por reparaciones de sus imágenes que daño el huracán”, señaló.
Dijo que desde noviembre a su local acuden entre 20 o 30 personas por día para reparar a sus niños y tenerlos listos para estas fiestas.
Los principales trabajos que realiza son la construcción de extremidades, colocación de pestañas y pintados.
Para Enrique este oficio no es solo un trabajo sino un arte que fue inculcado por sus padres de generación en generación desde hace 30 años.
“Gracias a mis padres aprendí este trabajo y para mi significa mucho porque es un arte lo que realizamos y si tienes fe la dicha por ver al niño restaurado te llena de bendiciones”, aseguró.
Otros locales que también se encargan de la reparación de esculturas comentaron que las principales fechas en las que el trabajo aumenta son en diciembre, en la fiesta de los reyes magos y en el día de la candelaria.
