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Ciudad de México.- Un juez de control del Reclusorio Norte definió ayer la situación de diez detenidos tras la marcha de la llamada Generación Z, que el sábado dejó un saldo de 20 civiles y 100 policías lesionados en la Ciudad de México.
El juez validó las detenciones y abrió procesos por lesiones, robo y otros delitos, mientras avanza la indagatoria por tentativa de homicidio en carpetas relacionadas con los disturbios.
En una de las audiencias, el juzgador vinculó a proceso a Daniel David “N”, de 20 años; José Luis “N”, de 22; y Enrique “N”, de 23, a quienes imputan lesiones dolosas contra dos policías de la SSC. Los tres continuarán su proceso en libertad, con firma quincenal y prohibición de acercarse o contactar a las víctimas.
En otra sesión fueron vinculados Said “N” y Carlos Miguel “N” por lesiones, con las mismas medidas cautelares.
En contraste, las defensas de José Enrique “N”, Sergio “N”, Bryan Mario “N”, Bryan “N” y Eduardo “N” pidieron duplicidad del término constitucional, por lo que su situación jurídica se resolverá el viernes. El juez ordenó mantenerlos en prisión preventiva justificada ante la falta de arraigo y otros elementos señalados por la Fiscalía.
Sobre Eduardo “N”, instruyó además aplicar el Protocolo de Estambul para determinar si sufrió tortura durante su detención, como denunció su defensa.
En el Reclusorio Norte continuaban también las audiencias de otros ocho acusados por tentativa de homicidio, en carpetas separadas pero relacionadas con los hechos violentos del sábado.
Un día antes, el secretario de Seguridad Ciudadana, Pablo Vázquez Camacho, reportó 18 posibles violaciones al protocolo policial durante la marcha, incluidas acusaciones de uso excesivo de la fuerza. Siete de esos casos, entre ellos denuncias de agresiones a periodistas, derivaron en la suspensión temporal de los agentes involucrados mientras se completan las investigaciones.
