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Acapulco, Guerrero.— El diputado local Joaquín “Jacko” Badillo Escamilla convirtió su primer informe legislativo en una plataforma de respaldo al senador Félix Salgado Macedonio y en un ensayo de campaña rumbo a la alcaldía de Acapulco.
Durante el evento, realizado este jueves en un salón del hotel Hotsson Smart, ante unas 700 personas, el legislador morenista pidió abiertamente que Salgado Macedonio sea el candidato de Morena a la gubernatura de Guerrero en 2027. “Una norma interna del partido no puede estar por encima de la Constitución”, justificó, al rechazar los lineamientos que impiden la sucesión familiar dentro del partido.
El acto, cargado de simbolismo político, incluyó un video de actividades que cerró con imágenes de Badillo junto al propio Salgado Macedonio, la gobernadora Evelyn Salgado Pineda, la presidenta Claudia Sheinbaum y la dirigente nacional Luisa María Alcalde. Los asistentes corearon en varias ocasiones “¡Presidente, presidente!”, consigna que Badillo escuchó con sonrisa de aspirante.
Consultado sobre el destape, Salgado Macedonio bromeó: “Jacko está destapado desde cuándo… que no se entere el INE”, y más tarde aclaró que se trató de “un informe de actividades, no de promoción personalizada”, aunque admitió: “Ya todos sabemos lo que quiere Jacko”.
Al final, el diputado confirmó su interés en competir por la presidencia municipal del puerto. “He estado listo para Acapulco, he competido dos veces”, dijo, recordando sus pasadas postulaciones por el PVEM y el PRD.
Sobre su defensa de Félix Salgado, insistió: “Por correspondencia natural, él debería ser el candidato a gobernador; lo más congruente es escuchar la voz del pueblo”.
La alcaldesa Abelina López Rodríguez no asistió al acto, aunque fue invitada. Badillo evitó opinar sobre la polémica del collar que usa la presidenta municipal y, entre risas, se deslindó: “Yo uso uno que me costó 25 pesos”.
Al evento acudieron los senadores Félix Salgado y Beatriz Mojica, diputados locales de diversos partidos y representantes del gobierno estatal, de la UAG y de la Marina.
El mitin disfrazado de informe cerró con aplausos y el grito repetido de “¡Presidente, presidente!”, muestra de que el “felixismo” acapulqueño empieza a moverse rumbo al 2027.
