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Un operativo de seguridad de los tres niveles de gobierno se desplegó este jueves en el Centro de Reinserción Social (CERESO) de Las Cruces, en Acapulco, luego de que un grupo de internos intentara amotinarse para evitar traslados ordenados por un juez.
De acuerdo con la Secretaría de Seguridad Pública de Guerrero, la protesta se originó tras la notificación a varios reclusos sobre su reubicación a otros centros penitenciarios. Un grupo reducido de internos se manifestó e inició disturbios en distintas áreas del penal, lo que motivó la intervención inmediata de elementos de la Policía Estatal, Guardia Nacional y Secretaría de la Defensa Nacional.
Las autoridades precisaron que se aplicaron protocolos de seguridad para replegar a los inconformes y restablecer el orden, sin que se registraran incidentes mayores ni personas lesionadas. La situación quedó controlada y se reforzó la vigilancia tanto al interior como en el perímetro del penal para prevenir nuevos brotes de violencia.
El centro penitenciario, ubicado en la zona suburbana de Acapulco, permanece bajo resguardo de fuerzas estatales y federales, mientras la Fiscalía y el Poder Judicial revisan el cumplimiento de las órdenes de traslado.
