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La boxeadora argelina Imane Khelif ha avanzado a las semifinales en los Juegos Olímpicos de París 2024, asegurando así al menos una medalla de bronce para su país en la categoría de 66 kilos.
Esta victoria llega tras superar a la húngara Lucca Anna Hamori por decisión unánime de los jueces.
El éxito de Khelif en el ring se produce en medio de una intensa controversia sobre su género, que incluyó críticas por parte de líderes internacionales y amplia cobertura mediática.
Después de su victoria, Khelif expresó emociones fuertes y habló públicamente por primera vez sobre las acusaciones y la posterior suspensión por parte de la Federación Internacional de Boxeo en 2023.
"He boxeado internacionalmente durante años y ellos fueron deshonestos conmigo", declaró Khelif a BeinSports, refiriéndose a la federación que la sancionó por no pasar los exámenes médicos de género.
La pugilista también señaló que su lucha va más allá del ring, describiéndola como "una cuestión de dignidad y de honor para cada mujer".
El apoyo local no se hizo esperar, con el presidente de Argelia, Abdelmadjid Tebboune, expresando su respaldo a través de las redes sociales.
"Has honrado a Argelia y a la mujer argelina", escribió Tebboune, prometiendo apoyo continuo independientemente de los resultados futuros de Khelif.
La situación ha generado una discusión más amplia sobre la inclusión y el tratamiento de los atletas en el deporte internacional, especialmente en términos de políticas de género y justicia deportiva.
Mientras tanto, la rival de Khelif, Hamori, quien previamente había publicado una imagen polémica de Khelif en Instagram, retractó cualquier comentario negativo, afirmando su respeto hacia su contrincante.
