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El gobernador de Chiapas, Eduardo Ramírez Aguilar presentó este día un helicóptero Black Hawk, de fabricación norteamericana que tiene un costo superior a los 20 millones de dólares para que la Policía Estatal combata el crimen organizado en municipios que limitan con Guatemala, donde se han registrado presencia de células de sicarios.
En Tapachula donde se hizo el evento de presentación, el gobernador declaró que uno de sus objetivos que se ha propuesto, es buscar la seguridad de los habitantes que durante más de cuatro años estuvieron inmersos en una guerra entre el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y Cártel de Sinaloa, que dejó una estela de miles de desarraigados, desaparecidos y ejecuciones extrajudiciales.
Sobre la impunidad de la que gozan los funcionarios de la pasada administración dijo que él está enfocado en lograr la seguridad. “Nosotros trabajamos para el presente, para garantizar la paz en Chiapas”.
El exgobernador Rutilio Escandón, actual cónsul en Miami, acusado por el excandidato al Senado, Willy Ochoa de haber dejado entrar a Chiapas a grupos criminales, dijo que no será llamado a declarar ante el Ministerio Público. “Que lo juzgue la historia”, indicó.
Afirmó que su gobierno no se inclina a favor de ninguna organización criminal. “Hoy no hay complicidad; hay honradez”, enfatizó.
Willy Ochoa declaró que una organización criminal se puede infiltrar en la estructura de un gobierno, cuando hay permisibilidad. “Y eso fue exactamente lo que ocurrió bajo el gobierno de Rutilio Escandón”, expuso en un comunicado.
