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Guerrero.- El senador Félix Salgado Macedonio afirmó que el Estado mexicano debe ofrecer una disculpa pública por los crímenes cometidos durante la Guerra Sucia y la persecución contra luchadores sociales, pero evadió asumir o exigir responsabilidades específicas por el homenaje rendido por el gobierno de Guerrero al exgobernador Rubén Figueroa Figueroa, acto que generó una fuerte indignación entre víctimas, familiares y sectores sociales.
Entrevistado tras acudir al banderazo del operativo de seguridad por el periodo vacacional decembrino, el legislador fue cuestionado sobre la exigencia pública de Micaela Cabañas, hija del guerrillero Lucio Cabañas, quien demandó una disculpa del gobierno del estado por el homenaje organizado por la Secretaría de Cultura a uno de los principales personajes asociados con la represión de los años setenta.
“Por supuesto que el Estado debe de ofrecer disculpas por la guerra sucia a los familiares, nosotros estamos con ellos”, respondió Salgado Macedonio. Sin embargo, cuando se le insistió en que la disculpa solicitada es por un hecho concreto y reciente —el homenaje oficial a Figueroa—, el senador desvió la conversación hacia consignas históricas.
“Nosotros de ahí venimos, de la lucha social. Homenajear, apoyar al homenaje a Lucio Cabañas, viva Lucio Cabañas, viva Genaro Vázquez”, expresó, sin responder de manera directa a la exigencia planteada por las víctimas.
Ante una nueva insistencia, visiblemente incómodo, Salgado Macedonio reiteró que las disculpas deben ser ofrecidas por “el Estado mexicano” a las víctimas de la Guerra Sucia, pero cerró filas con el gobierno estatal al asegurar que la gobernadora Evelyn Salgado Pineda no tuvo responsabilidad en el homenaje a Rubén Figueroa.
“La gobernadora no le hizo ningún homenaje a Rubén Figueroa. No se le tiene que hacer homenaje a ningún chacal, a ningún asesino”, declaró, pese a que el acto fue organizado por una dependencia del propio gobierno estatal.
Cuestionado sobre si la secretaria de Cultura, Aída Melina Martínez Rebolledo, debería ofrecer las disculpas públicas exigidas por los familiares de las víctimas, el senador se deslindó: “Ahí sí no me meto”, respondió de manera tajante.
A lo largo de la entrevista, Salgado Macedonio insistió en una postura general: “El Estado mexicano tiene que ofrecer disculpas a las víctimas de la Guerra Sucia de los años 70”, subrayando que Guerrero fue uno de los estados más golpeados por la represión. No obstante, evitó precisar cómo, cuándo y quién debe asumir la responsabilidad política por el agravio reciente.
El senador informó finalmente que el periodo ordinario de sesiones en la Cámara Alta ha concluido y que el próximo arranque será en febrero, cuando se discutirá la nueva ley electoral.
Mientras tanto, el caso del homenaje a Rubén Figueroa deja al descubierto una narrativa oficial que reconoce los agravios históricos, pero esquiva enfrentar los errores del presente, incluso cuando estos provienen del propio gobierno al que el senador pertenece.
