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En entrevista telefónica a Bajo Palabra, el diputado migrante por Morena, Aniceto 'Cheto' Polanco Morales, manifestó su rechazo a la iniciativa legislativa aprobada recientemente por la Cámara de Representantes de Estados Unidos que contempla un impuesto del 3.5% a las remesas enviadas por trabajadores migrantes a sus familias en México.
El legislador, radicado en Estados Unidos desde hace cuatro décadas, advirtió sobre el impacto económico y social que esta medida tendría en la comunidad migrante y en sus familias en territorio mexicano. Polanco explicó que la propuesta original planteaba un gravamen del 5%, sin embargo, tras diversas gestiones, se logró reducir al 3.5%. “Escribimos cartas a nuestros legisladores, a la Cámara Baja. Estuvimos haciendo llamadas. Sin embargo, no pudimos eliminar esta”, detalló.
Polanco informó que desde hace días se ha iniciado una nueva campaña enfocada en contactar a los senadores estadounidenses, a quienes se les busca explicar que esta iniciativa representa un acto de doble tributación y afecta directamente a los migrantes que ya pagan impuestos locales, estatales y federales en Estados Unidos. “No se puede pagar doble tributación. Esta medida es ilegal”, subrayó.
El diputado sostuvo que la afectación no solo es financiera, sino también discriminatoria, al señalar que el impuesto se aplicaría únicamente a personas sin documentos migratorios. “Yo creo que es una medida clasista porque nada más a los que no tienen documentos se les va a cobrar el 3.5%”, puntualizó.
Sobre las acciones que está impulsando desde su posición como diputado migrante, Polanco Morales remarcó que continúa promoviendo campañas de información, recolección de firmas y envío masivo de cartas y llamadas telefónicas a las oficinas de los senadores. “Ya tenemos las cartas listas, hechas nomás para que nos las firmen y que llamen por teléfono a los senadores de aquí”, afirmó.
Ante la posibilidad de movilizaciones anunciadas por la presidenta Claudia Sheinbaum, el legislador explicó que, debido a su posición como representante del gobierno mexicano, actúa con cautela para no interferir directamente en asuntos políticos internos de Estados Unidos. “Como ciudadano en ese país, yo puedo protestar, pero como diputado federal no puedo interferir en la política”, dijo.
Polanco destacó que forma parte de la Comisión de Derechos Plenos para los Inmigrantes y de una coalición que tiene una fuerte presencia en California. Según explicó, estas organizaciones operan de forma autónoma y están coordinando acciones paralelas a las iniciativas del gobierno mexicano. “Nos organizamos independientemente de que la presidenta nos haga el llamado”, señaló.
Respecto al panorama legislativo en Estados Unidos, Polanco se mostró prudente, aunque manifestó confianza en el poder judicial de ese país. “El Poder Judicial ha detenido varias iniciativas del presidente y las debe de parar todas. Yo creo que afecta, afecta a nuestra economía”, expresó.
También compartió la afectación directa que esta situación está generando en su entorno personal y profesional. Dueño de una panadería en Estados Unidos, explicó que la incertidumbre económica está impactando en los hábitos de consumo de la comunidad. “La gente tiene miedo de salir a comprar, de invertir, de comprar casas”, comentó. Agregó que el aumento de aranceles a productos como el aguacate incide en el precio final para los consumidores, lo que encarece los costos de operación de negocios como el suyo. “El barrote me cuesta ahora, en vez de 10 dólares, me cuesta 20”, ejemplificó.
En ese sentido, criticó las políticas impulsadas por la administración del presidente Donald Trump, asegurando que afectan a todos los sectores de la sociedad, incluidos los ciudadanos estadounidenses. “Nos están dando en la 'mandarina' a su propia gente”, afirmó, al tiempo que recordó que Estados Unidos es un país construido por migrantes. “Incluso Trump, si no hubiera cruzado su madre el mar, no estuviera aquí tampoco. Todos somos migrantes aquí”, expresó.
El legislador señaló que si bien respeta y valora las acciones emprendidas por la presidenta Sheinbaum, la coalición a la que pertenece ya se encuentra movilizada desde antes del anuncio gubernamental. “Nuestra política es del diálogo, no de la confrontación. El diálogo debe de prevalecer hasta el último segundo”, insistió.
Finalmente, hizo un llamado a la comunidad migrante para continuar con las acciones de presión dirigidas al Senado estadounidense. “Sigamos mandando cartas a nuestros senadores para que cuando llegue la hora de votación voten en contra”, instó.
La aprobación del impuesto a las remesas forma parte de un paquete fiscal promovido por el presidente Trump y aprobado en la Cámara de Representantes por un estrecho margen de 215 votos a favor contra 214 en contra. El proyecto aún debe pasar por el Senado.
De ser aprobado, el impuesto afectaría a millones de familias mexicanas que dependen de las remesas como fuente principal de ingresos. En 2024, México recibió más de 60 mil millones de dólares por concepto de remesas, según datos del Banco de México. Un gravamen del 3.5% representaría una reducción significativa en los recursos disponibles para estas familias.
Polanco, quien asumió su cargo hace menos de un año, reiteró que aunque su experiencia como legislador es reciente, su activismo a favor de los derechos de los migrantes se extiende por casi tres décadas. “En la lucha por los migrantes ya tengo casi 30 años”, concluyó.
