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Chihuahua.- Un operativo militar en Aldama, Chihuahua, terminó este martes con la captura de Roberto “N”, alias El 02 y/o El 04, identificado por autoridades federales como líder de la célula “Los Fariseos”, un brazo operativo de Los Cabrera Sarabia, facción ligada al Cártel de Sinaloa. La detención ocurrió después de un enfrentamiento con elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional y de la Guardia Nacional en la comunidad de El Pueblito.
Considerado objetivo prioritario por el gobierno federal, El 02 operaba en los municipios de Ojinaga, Aldama, Coyame del Sotol y Manuel Benavides, zonas donde se le atribuye el encabezar agresiones armadas, ordenar ejecuciones y disputar territorio con el grupo criminal La Línea. Su esquema delictivo combinaba narcomenudeo, reclutamiento y acciones directas contra células rivales, según información consultada por Infobae México.
En el operativo fueron detenidas diez personas más, presuntos integrantes de su círculo cercano. La magnitud del aseguramiento evidenció el nivel de armamento con el que operaba la célula: 11 rifles de asalto, dos ametralladoras, dos fusiles Barrett calibre .50, tres vehículos, artefactos explosivos y un dron empleado —según fuentes militares— para vigilancia y reconocimiento.
La captura de Roberto “N” ocurre mientras avanza en Estados Unidos una solicitud de extradición en su contra, lo que lo convierte en una ficha relevante dentro del mapa criminal fronterizo. En México, su nombre aparece recurrentemente en reportes sobre violencia reciente en Ojinaga y Coyame, donde las confrontaciones entre Los Cabrera Sarabia y La Línea han dejado desplazamientos y homicidios.
Tras la detención, el Ejército estableció coordinación con la Fiscalía General de la República para integrar la carpeta de investigación y poner a disposición a los detenidos y al armamento decomisado.
El golpe se suma al arresto, en octubre, de Leonardo Daniel Martínez Vera, conocido como El Pato, otro operador de Los Mayos —facción del Cártel de Sinaloa— y presunto aliado de Los Cabrera en Chihuahua. Ambos nombres aparecen en investigaciones sobre el control de rutas de trasiego hacia Estados Unidos y sobre el reclutamiento de jóvenes para tareas de vigilancia y agresiones armadas en municipios de la sierra y la frontera.
Las autoridades federales presentan estas detenciones como parte de una estrategia de contención contra el Cártel de Sinaloa. Sin embargo, en municipios como Aldama y Ojinaga, la población sigue padeciendo una disputa que, pese a golpes relevantes, no muestra señales claras de desarticulación.
