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Su ataúd fue cargado por policías y empleados de una funeraria, en un acto sobrio y solitario
Chilpancingo, 8 de abril de 2024.- En una ceremonia marcada por la ausencia y el silencio, Ana Rosa, vinculada al secuestro y asesinato de la menor Camila en Taxco, fue sepultada este mediodía en una fosa común de la ciudad de Iguala, lejos de su hogar y sin la presencia de familiares o seres queridos.
Después de permanecer dos semanas en el Servicio Médico Forense, debido a la incertidumbre sobre si su cuerpo fue reclamado o las autoridades negaron su entrega, finalmente, sus restos encontraron descanso en el campo santo, custodiados únicamente por un grupo de policías que resguardaron el lugar durante el sepelio.
Ana Rosa falleció a consecuencia de un linchamiento llevado a cabo por una multitud en Taxco de Alarcón, después de ser acusada por la comunidad de participar en el secuestro y homicidio de Camila, una niña de 8 años.
Tras el evento, sus hijos, Axel y Alfredo, este último menor de edad, junto con José, pareja sentimental de Ana Rosa y quien supuestamente ayudó a trasladar el cuerpo de Camila, se encuentran detenidos y vinculados a proceso por este crimen.
La sepultura de Ana Rosa se realizó sin rituales, oraciones, flores o velas; su ataúd fue cargado por policías y empleados de una funeraria, en un acto sobrio y solitario.
