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Chilpancingo, Guerrero.— En medio de una escalada de violencia y tras el llamado del alcalde Gustavo Alarcón para que el Gobierno Federal refuerce la seguridad en la capital del estado, la Mesa de Coordinación para la Construcción de la Paz afirmó este jueves que el edil no ha presentado ninguna solicitud formal de intervención ni de incremento operativo. La declaración surge un día después de que Alarcón pidiera públicamente un despliegue federal permanente, argumentando que la situación “ha rebasado las capacidades de cualquier gobierno local”.
En un comunicado oficial, las instituciones federales y estatales —Sedena, Marina, Guardia Nacional, Policía Estatal, FGR y Fiscalía estatal— señalaron que el despliegue en Chilpancingo se mantiene de manera permanente, con patrullajes, vigilancia en zonas estratégicas y filtros en accesos y salidas de la ciudad. Sin embargo, destacaron que no existe un oficio del alcalde dirigido a la Mesa de Seguridad, pese a la solicitud que Alarcón expuso en medios de comunicación nacionales.
El posicionamiento del alcalde y la postura oficial ocurre en un contexto de alta tensión por recientes hechos delictivos en la capital y a pocos días de las festividades decembrinas. Alarcón afirmó ayer que su petición no busca confrontar a ninguna autoridad, sino enfrentar un escenario que “no atiende colores ni partidos”. “La situación actual ha rebasado las capacidades de cualquier gobierno local”, dijo en entrevista con Ciro Gómez Leyva.
El pronunciamiento también se enmarca en una creciente preocupación nacional por la violencia contra autoridades municipales. Un mes antes, el alcalde de Uruapan, Michoacán, Carlos Manzo, fue asesinado durante un acto público. Y en Guerrero persisten antecedentes inmediatos: en octubre de 2024, el entonces alcalde de Chilpancingo, Alejandro Arcos Catalán, fue hallado decapitado tras perder contacto durante un traslado a Petaquillas. Días antes había sido asesinado el secretario general del ayuntamiento.
Pese al señalamiento sobre la falta de una solicitud formal, la Mesa de Coordinación afirmó que continuará “manteniendo la coordinación con todos los órdenes de gobierno” y que su compromiso es fortalecer la operatividad interinstitucional para garantizar la estabilidad en Chilpancingo.
